¡Amo lo que hago!
- Cali Bustos
- 14 feb
- 2 Min. de lectura

En el día del amor, solemos pensar en nuestras relaciones personales, pero hoy quiero invitarte a reflexionar sobre otro tipo de amor: el amor por lo que hacemos. Porque nuestros días están llenos de amor (o al menos, eso espero) y gran parte de ese amor viene de nuestra pasión, de nuestra entrega y de nuestro trabajo.
Cuando inicié mi agencia de marketing digital, me hice una promesa: esto va a existir mientras tenga ganas de hacerlo. El día que no me quiera levantar a darlo todo, esto pierde sentido. Porque no se trata solo de ganar dinero o de cumplir con expectativas externas; se trata de vivir en coherencia con lo que nos mueve, con lo que nos enciende por dentro.
No voy a romantizar el emprendimiento. Es un camino duro, lleno de retos, de momentos de incertidumbre y de sacrificios. Pero también es una oportunidad de diseñar nuestra propia historia, de conectar con personas y marcas que vibran con lo que hacemos, de sentirnos orgullosos del impacto que generamos.
Si algo he aprendido en este viaje es que el amor por lo que hacemos es el motor que nos mantiene en movimiento. No significa que todos los días sean fáciles ni que siempre nos sintamos motivados. Pero cuando hay pasión, cuando hay razones de peso para seguir, encontramos el camino de vuelta incluso en los momentos más difíciles.
Así que, en este día del amor, celebremos también el amor por nuestro trabajo, por nuestros sueños, por aquello que nos impulsa. Y si aún no has encontrado lo que amas, sigue explorando, sigue construyendo. Porque hacer lo que amas y hacerlo con amor es, sin duda, una de las formas más poderosas de vivir.
¡Feliz día de amar lo que hacemos! Y, sea lo que sea: hazlo con amor.